Suite Francis y George

Sobre el tema del amor apasionado entre Francis Bacon y George Dyer, la suite está ubicada en la planta baja de la casa, la suite tiene un área de 28 m2. Con su baño privado es ideal para parejas cama doble en 180 más una cama individual en 90. Con acceso directo al salón, La cocina común y la piscina, la suite Francis et George es perfecta para estancias de una semana o más.
Un hombre de 55 años, un hombre gay, es abordado por otro hombre de 30 años en una noche de 1964 o tal vez una tarde en un bar del inframundo en Soho en el momento de "Swinging London" donde el La homosexualidad, tolerada en estos lugares, todavía era legalmente un crimen. El mayor es rico y famoso, el más joven vive con rapiña y expedientes, ha estado en prisión, tiene un buen físico, alto, varonil y se ve "duro". Los dos hombres no se abandonarán durante siete años, socios de un asunto atronador que terminará con el suicidio del más joven.
Este hecho no era desconocido en ese momento, porque el hombre rico inauguró en París, el día después del paso al fatídico acto de su amante, una retrospectiva de su trabajo pictórico en el Grand Palais.
Sin embargo, en el otoño de 1971, Francis Bacon, el pintor cuyas obras están hoy entre las más valoradas en el mercado mundial del arte, junto con las de Picasso, acababa de perder a su compañero y a su amante Georges Dyer, el malvado. nombrado, el que había sido su modelo favorito. Continuará después de su muerte para hacerle muchos retratos.
Su muerte, sin embargo, oscureció los últimos veinte años de este artista en la cima de su gloria. Esta conexión había comenzado como un amor a primera vista. También hay una anécdota romántica, que circulaba entre el pintor familiar: Dyer habría intentado una noche de "ruptura" Francis Bacon, quien se habría sorprendido y habría respondido lo siguiente: "Eres muy torpe para un ladrón desnudarse, ven a mi cama, después de lo cual tomarás lo que quieras "
En este rasgo cáustico hay gran parte de la personalidad de Bacon: una insolencia estudiada e imperiosa, un arte de provocación e ironía, un manejo feroz de la flecha, una falta de inhibición, pero también un Inversión sexual masoquista de la cual el artista no hizo ningún misterio.